El Maltese Falcon fue construido por Perini Navi en Tuzla, Turquía, es un lujoso yate de vela, encargado y anteriormente propiedad del capitalista y empresario americano Tom Perkins. Es uno de los yates de vela privados más grandes del mundo con sus 88 metros de eslora (289 pies), es similar en eslora al Atenia del astillero Royal Huisman y al Eos del aleman Lürssen. El yate se vendido en 2009 a Elena Ambrosiadou, su actual propietaria, fundadora y presidenta de la empresa IKOS Ltd., una compañía con sede en Chipre que gestiona fondos de inversión mediante un sofisticado y novedoso programa informático que ha generado grandes beneficios. La armadora es británica de origen griego, graduada en Cambridge y con una exitosa trayectoria empresarial a sus espaldas.
El diseño del barco es extremadamente novedoso, fue construido aplicando el concepto “Dynaship”, un invento del ingeniero hidráulico alemán Wilhelm Prölss en 1960, que fue diseñado para crear un concepto de velero comercial de carga que funcionara con la menor tripulación posible. El barco cuenta con quince velas cuadradas (cinco por mástil), almacenadas mediante enrolladores en el interior de las vergas, las cuales pueden desplegarse en su totalidad en seis minutos. Los tres mástiles con los que cuenta la nave son de fibra de carbono, van encastrados en una base móvil independiente para cada uno de ellos y capaz de girar, con lo cual es el mástil completo el que gira para tomar la mejor posición que le permita recoger el máximo viento posible. Este sistema se fabricó y montó por una empresa financiada por Perkins, el primer armador del barco, en un astillero de Perini Navi en Estambul denominado "Yildiz Gemi" (literalmente: barco de las estrellas) en Tuzla, a 80 km. al este de Estambul, bajo la supervisión de la compañía inglesa Insensys y la holandesa Gerard Dijkstra & Partners. Los diseños interiores fueron obra de Ken Freivokh Design. El Maltese Falcon fue el tercer barco construido por Perini para Perkins.
El yate se controla fácilmente, es muy maniobrable y marinero a pesar de su enorme tamaño, especialmente en espacios reducidos. El sofisticado equipamiento electrónico con el que está dotado detecta parámetros como la velocidad del viento y muestra automáticamente los datos clave que afectan a la navegación, no obstante siempre es el oficial de guardia el que tiene que activar cualquier control, sin embargo, el concepto permite que una sola persona pilote la embarcación. En una entrevista de radio para el programa Negocios Globales de la BBC en diciembre de 2007, Perkins reconoció que él, personalmente, escribió algunas partes del software de control del barco, que es único en el mundo.
El
Maltese Falcon
está equipado con
dos
motores Deutz de 1800
caballos de potencia (1.300
kilovatios)
a
1.800
rpm
lo que le permite desarrollar una velocidad máxima de 20
nudos, sin provocar olas en su
estela y
prácticamente sin vibraciones
ni ruidos.
El
barco tiene
una tripulación permanente
de 18
personas para
gestionar los departamentos de cubierta y máquinas y
el de habilitación, que gestiona habitabilidad de un barco con
capacidad para doce personas,
además de cuatro miembros del
personal de los pasajeros. El
barco también
incluye un chef,
sobrecargo, mayordomo, camareros
y azafatas.
El Maltese Falcon se registró en Valletta, Malta en 2006. Completó sus pruebas de mar en el Mar de Mármara atravesando el estrecho del Bósforo, el 12 de junio de 2006, e hizo su viaje inaugural desde Turquía a Italia con escala en Malta en julio de 2006. Actualmente, el Maltese Falcon se puede chartear con un coste que oscila entre 400.000 y 420.000 euros por semana, más gastos extra.
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